Al igual que muchas cosas en Europa, una taza de café toma muchas formas diferentes dependiendo de dónde te encuentres. Eso se debe a que el enfoque del café varía enormemente en toda Europa. Algunos países lo ven como una costumbre social, otros como una necesidad. Os traemos 9 ciudades para visitar:

Dinamarca

Una señal de una gran ciudad cafetera es cuando ves que otros lugares del mundo intentan replicarla. Así es como ha crecido hasta convertirse en un gigante culinario internacional, la capital danesa también ha estado a la vanguardia del movimiento del café de la tercera ola.

Viena

Es una ciudad famosa por su cultura del café con sus cafeterías tradicionales con un entorno increíble y pasteles suntuosos. 

El café con crema  es muy popular en bebidas como el einspänner tradicional o el café helado de verano, al igual que los brebajes de café alcohólicos con una pizca de ron o licor de frutas.

Estocolmo

Cuando se habla de café en Europa, hay algunas razones por las que surgen ciudades escandinavas y nórdicas como Estocolmo.  Esa demanda, junto con el concepto sueco de fika , que fomenta la socialización con un café y un bocado. Y Estocolmo no es solo el centro cultural de Suecia; también es su capital del café, rebosante de pequeñas cafeterías.

Roma

No es ningún secreto que Italia ha jugado un papel muy importante en la forma en que se ha desarrollado el café en el mundo occidental. Y el país, obviamente, todavía lo adora, con un espresso rápido en el café bar como parte del ritual matutino de muchos italianos o saborear un capuchino en una bonita plaza.

Estambul

Lo que hace de Estambul una gran ciudad cafetera es que ofrece a los visitantes la oportunidad de experimentar esta versión tradicional del café . Típicamente servido en varios grados de dulzura y con delicias turcas, puedes encontrar café turco en innumerables lugares alrededor de Estambul. 

Berlín

La capital alemana fue otra ciudad arrastrada por el movimiento del café de la tercera ola, y ahora es posible encontrar café de calidad en toda la ciudad. Barrios de moda como Kreuzberg y Neukölln  o incluso el bullicioso Mitte y el exclusivo Charlottenburg.

Sarajevo, Bosnia y Herzegovina

Durante los días del Imperio Otomano, se introdujeron muchos hábitos y tradiciones culturales a la gente de los Balcanes. El café fue uno de ellos, y en los años posteriores, países como Bosnia y Herzegovina lo han hecho propio. Las diferencias entre el café turco y el café bosnio son sutiles, pero si te gusta explorar diferentes versiones del café, entonces vale la pena buscar el café bosnio. 

Liubliana, Eslovenia

Ljubljana, la frondosa y cosmopolita ciudad capital de Eslovenia, puede parecer una inclusión extraña pero dado que la ciudad se ha sentado durante mucho tiempo en la encrucijada de las influencias italiana, austriaca y balcánica, parecería inevitable que la cultura del café se arraigara.¿Qué es lo que no gusta de la idea de un café italiano o turco combinado con pasteles austriacos?

Reikiavik, Islandia

Finalmente, tenemos otra inclusión nórdica con la capital de Islandia, Reykjavik. Aquí, en esta pequeña ciudad del Atlántico Norte, no encontrarás ni rastro de cadenas globales, en cambio, descubrirás una gran cantidad de pequeños cafés llenos de carácter que se suman al encanto general de Reykjavik.

Referencias:

European Cities Coffee