Las torrijas, más parecidas a tal y como las conocemos ahora, tienen su origen en el siglo XV y nacen como una costumbre muy alejada de la celebración de la Semana Santa. Comenzaron a preparase para aliviar a las parturientas al dar a luz y favorecer su recuperación postparto en los años 1600. 

No se sabe a ciencia cierta como las torrijas se han instaurado como postre típico en Semana Santa, pero lo cierto es que al ser un alimento saciante y calórico que aportaba energía, comenzaron a incluirse en la Cuaresma para compensar los períodos de abstinencia de algunos alimentos. 

Una manera distinta de preparar este postre tan tradicional con un toque especial, son las torrijas de café. Se trata de una receta igual de fácil y sencilla de preparar que la tradicional pero con un toque diferente que seguro que encantará.

Ingredientes

• 8 rebanadas de pan para torrijas (mantendrá la consistencia sin que se rompa)
• 3 huevos
• 250 ml.leche 
• 60 ml. café 
• Un pellizco de sal
• La piel de 1 limón
• Ramita de canela
• 100 gr. azúcar 
• 1,5 cucharadita de cacao sin azúcar

¿Cómo prepararlo?

1. Preparar el almíbar con leche, azúcar, la rama de canela, limón y una pizca de sal. Calentar y dejar que se hierva durante 3 minutos.
2. Retiramos el cazo del fuego e incorporamos el café y el cacao. Mezclamos bien y dejamos que se infusione la mezcla.
3. Una vez que tengamos el almíbar listo cortamos las rebanadas de pan y las colocamos en el almíbar hasta que quede empapado. El tiempo dependerá del pan que utilicemos.
4. Pasamos cada rebanada bien empapada en almíbar por huevo batido.
5. Preparamos una sartén con aceite, cuando el aceite esté caliente añadimos el pan en la sartén.
6.  Dejamos que las rebanadas se doren por ambos lados. Una vez listas, las sacamos y las dejamos escurrir el exceso de aceite en un plato sobre papel de cocina.

De forma sencilla y rápida podemos disfrutar de unas torrijas diferentes, con un toque a café.